Una de sus principales ventajas es la versatilidad que ofrece a la hora de hacer cualquier receta. A parte, de los típicos fritos como pueden ser las patatas, croquetas, etc. Puedes hacer también, muffins, lasaña, verduras, carnes pescados... de una manera fácil, sencilla y deliciosa.
Ten en cuenta que no puedes meter en tu freidora de aire líquidos, como sopas o cremas, o alimentos que necesiten mucha agua para cocinarse.