Con un cuidado adecuado, las placas de inducción pueden ser más duraderas, en aspectos de limpieza, las dos al ser superficies planas nos reportan gran comodidad, la diferencia está en el calor residual que la vitrocerámica trae consigo. Cabe decir también que, uno de los problemas de las placas de inducción es que si se raya o mancha, se deteriora bastante, por lo que necesita un cuidado delicado.